Actividades marzo 2023

Comienza los fines de semana de un modo diferente…Estos son los jueves y viernes en La Finestra

CLASES DE FILOSOFÍA GRATUITAS...duración aproximada 30 min. Los jueves a las 19:00

Los aspectos de la vida que giran sobre el tiempo y la felicidad han sido preocupación fundamental a lo largo de la historia de la filosofía.

Reflexionaremos sobre el paso del tiempo con ¡No me da la vida! y porque la felicidad es importante en nuestras vidas, le dedicamos dos tardes con el título ¿Es posible la felicidad?

Ambos son temas que interesaron a los grandes filósofos de la historia y podremos aprender de ellos para llevar sus enseñanzas a nuestras vidas y que estas sean, si no más fáciles, más sensatas y serenas.

CHARLAS PARA REFLEXIONAR… duración aproximada 1h. Los viernes a las 19:30

Este mes, en nuestras charlas, son protagonistas los libros con El punto ciego y ;artes con mi viejo profesor. También respondemos a la siguiente pregunta ¿Solo se vive una vez?

El viernes 10, hablaremos sobre la obra El punto ciego de Daniel Goleman, conocido principalmente por su libro La Inteligencia emocional.

En el El punto ciego, que trata sobre la psicología del autoengaño, nos explica cómo las personas tenemos, en general, una visión limitada de las cosas, a veces no por desconocimiento, sino porque, o bien necesitamos ocultar ciertos aspectos incómodos, o bien queremos resaltar especialmente alguno que nos interese.

Este fenómeno se da a nivel intelectual y colectivo. Son los puntos ciegos que dificultan una visión más objetiva, tanto de nosotros mismos, como del mundo que nos rodea. Lo interesante de Goleman es como ilustra estos mecanismos de la psique, con ejemplos de la historia reciente, de vivencias personales o de personajes literarios.

En la charla se explicará esto con un poco más de detalle. Pero, sobretodo, va a ser una invitación a la reflexión. En primer lugar, conocer esta tendencia humana a disfrazar la realidad y ver si merece la pena vivir una ficción creada por nosotros mismos, o si es mejor empezar a recuperar la cordura.

Quizá lleguemos a la conclusión de que la búsqueda de la Verdad es consustancial a la naturaleza humana, y por muy justificada que este la mentira, siempre será un obstáculo para la auténtica felicidad.

Tras esta charla, el siguiente viernes, tocaremos el tema de la vida o de las distintas vidas que uno puede vivir, y terminaremos el viernes 31 con Martes con mi viejo profesor de Mitch Album.

La muerte como dulce amiga

La muerte, dulce amiga

Canción de la muerte… de José de Espronceda

Débil mortal no te asuste

mi oscuridad ni mi nombre;

en mi seno encuentra el hombre

un término a su pesar.

Yo, compasiva, te ofrezco

lejos del mundo un asilo,

donde a mi sombra tranquilo

para siempre duerma en paz.

Isla yo soy del reposo

en medio el mar de la vida,

y el marinero allí olvida

la tormenta que pasó;

allí convidan al sueño

aguas puras sin murmullo,

allí se duerme al arrullo

de una brisa sin rumor.

Soy melancólico sauce

que su ramaje doliente

inclina sobre la frente

que arrugara el padecer,

y aduerme al hombre, y sus sienes

con fresco jugo rocía

mientras el ala sombría

bate el olvido sobre él.

Soy la virgen misteriosa

de los últimos amores,

y ofrezco un lecho de flores,

sin espina ni dolor,

y amante doy mi cariño

sin vanidad ni falsía;

no doy placer ni alegría,

más es eterno mi amor.

En mi la ciencia enmudece,

en mi concluye la duda

y árida, clara, desnuda,

enseño yo la verdad;

y de la vida y la muerte

al sabio muestro el arcano

cuando al fin abre mi mano

la puerta a la eternidad.

Ven y tu ardiente cabeza

entre mis manos reposa;

tu sueño, madre amorosa;

eterno regalaré;

ven y yace para siempre

en blanca cama mullida,

donde el silencio convida

al reposo y al no ser.

Deja que inquieten al hombre

que loco al mundo se lanza;

mentiras de la esperanza,

recuerdos del bien que huyó;

mentiras son sus amores,

mentiras son sus victorias,

y son mentiras sus glorias,

y mentira su ilusión.

Cierre mi mano piadosa

tus ojos al blanco sueño,

y empape suave beleño

tus lágrimas de dolor.

Yo calmaré tu quebranto

y tus dolientes gemidos,

apagando los latidos

de tu herido corazón.

La muerte, una fase más en la vida

Bonito poema para ver a la muerte desde otro punto de vista totalmente diferente; no hay dolor, no hay sufrimiento, no hay penas, pero tampoco alegrías, porque la muerte es un tránsito a otra vida.

Ya nos dice el Bhagavad Gita, obra milenaria hindú, en su diálogo entre Krishna y Arjuna: «Si todo, cuando nace tiene que morir, todo cuando muere renace indefinidamente; pero el Espíritu humano, en cambio, jamás puede ser muerto: el fuego no puede quemarle, el agua no pueda negarle, ni la espada, herirle, porque es Eterno, Infinito, Inconmensurable, como aquella Divina Esencia de la que emanó»

También los griegos hablaron siempre de la Anastasis, que significa «levantamiento, resurgimiento, retorno, o resurrección», es decir, la continuada existencia del alma a lo largo de las reencarnaciones.

Y entre los druidas era tal la creencia firme y universal de la vida eterna que, según Diodoro Sículo, confiaban a las llamas mensajes para sus queridos muertos;según Pomponio Mela, y Valerio Massimo, admitían con la mayor naturalidad cuentas y deudas, a ser pagadas, no en esta vida, sino en la futura, por aquella eterna sentencia de la antigüedad sabia, de que la muerte era incapaz de separar lo que ya había unido la virtud (Quod virtus juncit, mors non separat)

«Tememos a la muerte porque no la miramos de frente, porque nos hemos propuesto desconocerla y olvidarla entre las algazaras del mundo. Pero la muerte no mata; es un mero nacimiento a otra vida. Parece una descomposición, porque nunca brota el tallo sin descomponer la semilla; nunca el fruto sin secar la flor; nunca una forma nueva, sin quebrantar, por lo menos, las formas de las que ha nacido en el crecimiento y progreso de todos los seres.

Hay gusanos en el cadáver, pero ellos, al éter del amor divino, se tornan en mariposas del cielo. La tumba, mirada desde abajo, parece un pudridero; mirada desde arriba, una florescencia. El sepulcro, que tanto nos aterra, será mañana nuestra cuna. Mientras nosotros lloramos a un muerto, como la individualidad tan trabajosamente conseguida a través de la evolución no puede perderse jamás, ven otros un recién nacido, porque la vida es eterna» Castelar

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Actividades abril, mayo 2022

¡Bienvenidos a nuestras charlas!

GEA, Madre Tierra, una visón tradicional de la naturaleza

Viernes 22 abril a las 19:30h

ID reunión: 850 3223 3190 – No es necesario código de acceso


Reflexiones en torno a la bondad humana

Viernes 29 abril a las 19:30h

ID reunión: 828 7682 5534 – No es necesario código de acceso


Juventud, el porqué del desconcierto

Viernes 6 de mayo a las 19:30h

ID reunión: 870 8636 8079 – No es necesario código de acceso


La escuela ecléctica de Alejandría

Viernes 13 de mayo a las 19:30h

ID reunión: 892 9420 7923 – No es necesario código de acceso


Cómo y dónde conocerse a sí mismo

Viernes 20 de mayo a las 19:30

ID reunión: 842 6510 1187 – No es necesario código de acceso


La curación emocional

Viernes 27 de mayo a las 19:30h

D reunión: 865 3994 3257 – No es necesario código de acceso

La crisis según Albert Einstein

Einstein solía contener en sus afirmaciones un gran espíritu de superación personal de lucha contra el miedo, de fomento por la creatividad y de la importancia de disfrutar de la vida. 

He aquí su reflexión sobre la crisis.

«No pretendamos que las cosas cambien, si siempre hacemos lo mismo.

La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países, porque la crisis trae progresos. La creatividad nace de la angustia como el día nace de la noche oscura.

Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis se supera a sí mismo sin quedar ‘superado’.

Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias, violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las soluciones. La verdadera crisis, es la crisis de la incompetencia. El inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones. Sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia. Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto, trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora, que es la tragedia de no querer luchar por superarla.»

Frases de Albert Einstein

1879-1955.

No podemos resolver problemas pensando de la misma manera que cuando los creamos.

Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica: la voluntad.

Dar ejemplo no es la principal manera de influir sobre los demás; es la única manera.

Nunca consideres el estudio como una obligación, sino como una oportunidad para penetrar en el bello y maravilloso mundo del saber.

Vivimos en el mundo cuando amamos. Sólo una vida vivida para los demás merece la pena ser vivida.

Hay dos maneras de vivir su vida: una como si nada es un milagro, la otra es como si todo es un milagro.

El que no posee el don de maravillarse ni de entusiasmarse más le valdría estar muerto, porque sus ojos están cerrados.

Intenta no volverte un hombre de éxito, sino volverte un hombre de valor

ANÉCDOTA

Epícteto y la otra intención II

Continuación.

 

Fuente: https://medium.com

Exposición «La tumba egipcia»

El martes 10 de septiembre a las 18:30h os invitamos a la inauguración de la recreación «La Tumba Egipcia». En ella se podrá visitar la réplica de una tumba egipcia y tendremos la oportunidad de comprobar cómo los egipcios entendían la muerte y el paso a la siguiente vida.

La exposición estará abierta del 10 de septiembre al 31 de octubre y el horario de visitas será martes, miércoles y jueves de 18:30 a 21:00.

La entrada es totalmente gratuita.

 

LA TUMBA : Punto de encuentro de dos mundos

La tumba era considerada por los egipcios como la vivienda o residencia del difunto y de ahí que se amueblara y decorara con sus objetos más queridos, pues era a la vez el soporte de la memoria terrenal y punto de encuentro entre los dos mundos, el de los muertos y el de los vivos. Una transición dramática que aparece en todos los textos funerarios, pues, si bien el difunto no puede contar más que con él mismo, con su propio esfuerzo y voluntad para lograr su destino y la liberación final, estos recintos sagrados que, como el interior de los sarcófagos, contenían textos escogidos del Libro de los Muertos, eran como una especie de “armadura” o escudo de protección, de “mapa” de una geografía celeste, cuyas indicaciones eran muy útiles al difunto y podían evitarle dificultades, sobre todo al comienzo de su itinerario por la oscuridad de los mundos inferiores hasta lograr la salida del alma a la luz de un nuevo día en la Tebas del Cielo.

 TESTAMENTO A ANUBIS.      

Anubis es la noche antes del cielo,
La sabiduría oculta de la sombra y la luz.
De ojos saltones que reflejan la luna y las estrellas.

Anubis es a quien los dioses obedecen
en serio respeto por su ladrido y mordisco,
las palabras medidas y las mandíbulas aplastantes firmes.

Anubis es el guardián desde lejos
que mira cuando ha llegado el momento de pesar
un alma, y juzga su vida como incorrecta o correcta.

Anubis nos conoce a todos por lo que somos
y ni ama, ni odia, ni da pausa
en su eterno ajuste de cuentas.

Su cuidado es el equilibrio y las leyes.
Porque la justicia es la tradición sagrada del chacal.

                                                       

El profeta de Khalil Gibran

Hacia el año 1923, el escritor libanés Khalil Gibran publica «El Profeta», esta obra será no sólo la de mayor éxito sino la más madura de cuantas escribe.

Filósofo y poeta, Gibran pasó muchos años pensando en el libro y esperando siempre momentos especiales. «Este libro es sólo una pequeña parte de lo que he visto y de lo que veo cada día, una pequeña parte de las muchas cosas que anhelan expresarse en los silenciosos corazones de los hombres y en sus almas. El Profeta es sólo la primera letra de una sola palabra.»

Cuando algunos le preguntaron como había sido escrito contestó: «El libro me ha escrito a mí». Estaba refiriéndose a que él era transmisor de una enseñanza universal que es patrimonio de la humanidad; si dejas que tu alma, libre de los egoísmos y estrecheces comunes, pueda viajar a mundos más puros entonces encuentra la fuente de conocimiento.

Él decía que «el Profeta» fue su segundo nacimiento y tomando como primero el biológico, el segundo es el nacimiento de la conciencia. En clave psicológica sería el alter ego de Kalil como diría Freud o, el «sí mismo» como diría Jung.

Presentándose con el nombre de Almustafá, el profeta, antes de partir del pueblo de Orfalase, a instancias de Almitra, la sacerdotisa, se dirige a los habitantes para decirles: «¿De qué otra cosa os puedo hablar sino de lo que veo vibrar en vuestras almas?».

Es entonces cuando nos acerca a los aspectos más importantes con los que toda persona se encuentra en su vida. Nos hará reflexionar sobre ellos, revisar nuestras ideas, nuestros sentimientos y nuestra actitud. Él nos abre la puerta para conocer y encontrarnos con el verdadero ser humano, aquel que se esconde tras las apariencias, el que puede emerger si sabemos esculpirlo.

En el amor: «el amor solo da de sí y nada recibe sino de sí mismo». En la amistad, «cuando vuestro amigo se calla, vuestro corazón continúa escuchando su corazón». Descubriendo qué es la alegría y la tristeza, «juntas llegan, y cuando la una viene a sentarse a vuestra mesa, recordad que la otra, dormida, os espera en vuestro lecho». En el trabajo de cada uno, «y trabajar con amor es estar unido con vosotros mismos, y con los otros y con dios». Profundizando sobre la verdadera libertad, «y si es un temor el que queréis disipar, el centro de este temor está en vuestro corazón y no en la mano que teméis». Y la generosidad, «poco dais si sólo dais de vuestros bienes, dais de verdad sólo cuando dais de vosotros mismos».

Y tras todo ese recorrido, apartando en cada giro un velo más nos descubrirá levemente los misterios de la vida y de la muerte con su lenguaje íntimamente poético y cargado de significado.

«¿Y qué es cesar de respirar sino liberar al aliento de sus mares agitados, a fin de que se levante y se expanda y busque a Dios libremente?» Almustafá partirá del pueblo de Orfalese pero su marcha no es sinónimo de vacío, se ha convertido en guía para que cada uno reconozca su propio ser interior y puedan vivir su propia vida de acuerdo con su naturaleza inmortal que ha arraigado en lo más profundo de sus corazones.

«Vosotros no estáis encerrados en vuestros cuerpos, lo que sois habita más arriba de las montañas y vaga en el viento…»

Kalil Gibran deja constancia de la importancia que tiene el Profeta, ya sea en el libro o en la vida real. Es la figura del maestro, del hombre de conocimiento, es el que guarda las semillas de la sabiduría para aquel que la ame y quiera buscarla. Para cubrir la necesidad de aprender que tiene el ser humano se necesita de aquel que enseñe, alguien con esa capacidad tan poco común de ver más allá de la superficie y profundizar a través de las máscaras de la vida; y ese alguien nos puede descubrir algo que naturalmente todo ser humano necesita porque devuelve la magia de saberse humano y la posibilidad de vivir de acuerdo con nuestras nobles aspiraciones.

Artículo escrito por Yolanda García

Dijo Almitra: Háblanos del Amor.

Y él levantó la cabeza, miró a la gente y una quietud descendió sobre todos. Entonces, dijo con gran voz:
Cuando el amor os llame, seguidlo.
Y cuando su camino sea duro y difícil.
Y cuando sus alas os envuelvan, entregaos. Aunque la espada entre ellas escondida os hiriera.
Y cuando os hable, creed en él. Aunque su voz destroce nuestros sueños, tal cómo el viento norte devasta los jardines.

Porque, así como el amor os corona, así os crucifica.
Así como os acrece, así os poda.
Así como asciende a lo más alto y acaricia vuestras más tiernas ramas, que se estremecen bajo el sol, así descenderá hasta vuestras raíces y las sacudirá en un abrazo con la tierra.

Como trigo en gavillas él os une a vosotros mismos.
Os desgarra para desnudaros.
Os cierne, para libraros de vuestras coberturas.
Os pulveriza hasta volveros blancos.
Os amasa, hasta que estéis flexibles y dóciles.
Y os asigna luego a su fuego sagrado, para que podáis convertiros en sagrado pan para la fiesta sagrada de Dios.

Todo esto hará el amor en vosotros para que podáis conocer los secretos de vuestro corazón y convertiros, por ese conocimiento, en un fragmento del corazón de la Vida.

Pero si, en vuestro miedo, buscáreis solamente la paz y el placer del amor, entonces, es mejor que cubráis vuestra desnudez y os alejéis de sus umbrales.
Hacia un mundo sin primaveras donde reiréis, pero no con toda vuestra risa, y lloraréis, pero no con todas vuestras lágrimas.
El amor no da nada más a sí mismo y no toma nada más que de sí mismo.
El amor no posee ni es poseído.
Porque el amor es suficiente para el amor.

Cuando améis no debéis decir: «Dios está en mi corazón», sino más bien: «Yo estoy en el corazón de Dios.»
Y pensad que no podéis dirigir el curso del amor porque él si os encuentra dignos, dirigirá vuestro curso.

El amor no tiene otro deseo que el de realizarse.
Pero, si amáis y debe la necesidad tener deseos, que vuestros deseos sean éstos:
Fundirse y ser como un arroyo que canta su melodía a la noche.
Saber del dolor de la demasiada ternura.
Ser herido por nuestro propio conocimiento del amor. Y sangrar voluntaria y alegremente.
Despertarse al amanecer con un alado corazón y dar gracias por otro día de amor.
Descansar al mediodía y meditar el éxtasis de amar. Volver al hogar con gratitud en el atardecer.
Y dormir con una plegaria por el amado en el corazón y una canción de alabanza en los labios.

Flores de Bach, resumido


La teoría del Dr. Bach

El Dr. Bach era un médico de Gales, Gran Bretaña, que además de graduarse como médico en distintas especialidades, también trabajó como investigador y científico comprometido con una manera de curar a los pacientes respetuosa y benigna; algo de lo que se sentía cada vez más alejado con la medicina alopática y por lo que terminó acercándose a la homeopatía como terapia médica.

Fue precisamente durante su labor en un hospital homeopático de Londres que empezó a observar que algunos pacientes con determinadas patologías tenían ciertos rasgos personales y emocionales en común, de modo que decidió tratar, no solo la enfermedad del paciente, sino su personalidad. Fue entonces cuando empezó a experimentar con las esencias florales de plantas recogidas en Gales como tratamiento para resolver conflictos emocionales según la personalidad del paciente. En realidad, estaba convencido de que la mente ejerce un papel determinante en las enfermedades y de que, al solucionar las afecciones emocionales, los problemas de salud se resolvían de una manera más definitiva y eficaz.

De este modo consiguió, según sus investigaciones, reunir 38 remedios que son los que se utilizan en la actualidad y que conocemos como Flores de Bach.

 

Beneficios de las Flores de Bach

Las flores de Bachtienen múltiples aplicaciones:

  • Para resolver enfermedades que tienen un origen emocional, mental o psicosomático.
  • En los niños suelen ejercer un efecto más potente que en las personas adultas.
  • Las flores de Bach también se utilizan en animales y plantas (cuando se ven expuestas a cambios o condiciones adversas).

Las flores de Bach están indicadas en personas de cualquier edad o condición, sanas o enfermas y no se conocen contraindicaciones al tomar medicamentos u otras sustancias terapéuticas.

 

Qué flores tomar

A la hora de elegir las flores que vamos a tomar, podemos recurrir a un terapeuta especializado, o implicarnos investigando sobre los efectos de cada flor y elaborar nuestra propia mezcla. Para ello, es necesario revisar la lista de los 38 remedios y sus efectos.El Dr. Bach aconsejaba que no se tomasen más de siete flores en la mezcla de tratamiento, por lo que, si nos vemos reflejados en numerosos síntomas o aplicaciones de las distintas flores, lo mejor es priorizar y determinar qué problemas son los más importantes o con qué rasgos nos sentimos más identificados hasta completar las siete flores que conformarán nuestra mezcla. A continuación te mostramos una secuencia muy resumida de los efectos y aplicaciones de cada flor:

  • Agrimony: Ocultar preocupación tras una máscara de alegría.
  • Aspen: Miedo a lo sobrenatural y a la muerte.
  • Beech: Intolerancia, arrogancia, crítica desmedida.
  • Centaury: No saber decir “no”.
  • Cerato: Buscar la aprobación y consejo o aceptación de los demás.
  • Cherry Plum: Miedo a perder el control, ataques de terror, miedo a la locura.
  • Chestnut Bud: Incapacidad para corregir y aprender de los errores.
  • Chicory: Sobreprotección y dominación egoísta.
  • Clematis: Soñar en exceso sin vivir en la realidad.
  • Crab Apple: Terror a estar sucio, a contaminarse a ser impuro.
  • Elm: Exceso de responsabilidades, colapso.
  • Gentian: Pesimismo, depresión, flaqueza, desesperanza.
  • Gorse: Cuando se ha perdido la esperanza del todo.
  • Heather: Egocentrismo desmedido, cuando todo gira entorno a uno mismo.
  • Holly: Celos, envidia, rabia, odio, rencor.
  • Honeysuckle: Anclarse en el pasado sin vivir el presente.
  • Hornbeam: Agotamiento psicológico y físico.
  • Impatience: Impaciencia, soledad, ansiedad.
  • Larch: Baja autoestima, sentimiento de fracaso.
  • Mimulus: Miedo a las situaciones cotidianas y conocidas.
  • Mustard: Depresión sin razón aparente.
  • Oak: Personas obsesivas que trabajan incansablemente y luchan contra corriente. Agotamiento profundo.
  • Olive: Agotamiento por diversas causas físicas o mentales. Derrota.
  • Pine: Eceso de sentimiento de culpa.
  • Red Chestnut: Preocupación excesiva por los seres queridos.
  • Rock Rose: Ataques de ansiedad, pánico incontrolable, estados de angustia.
  • Rock Water: Personas perfeccionistas en exceso, rigidez, exceso de control.
  • Scleranthus: Incapacidad para elegir entre varias alternativas.
  • Star of Bethlehem: Conmoción física o emocional.
  • Sweet Chestnut: Cuando se llega al límite de la desesperación y la desesperanza. Cuando ya no se vislumbra la luz.
  • Vervain: Exceso de entusiasmo y euforia, fanatismo.
  • Vine: Personas dominadoras, inflexibles y tiranas.
  • Walnut: Terror a los cambios.
  • Water Violet: Orgullo, sentimiento de superioridad.
  • White Chestnut: Exceso de pensamientos y diálogo interno.
  • Wild Oat: Dudas ante el cometido en la vida, falta de metas y ambiciones.
  • Wild Rose: Apatía, falta de motivación, tristeza.
  • Willow: Victimismo, resentimiento.


Rescue Remedy

El Dr. Bach elaboró una mezcla estándar de cinco flores para utilizar en caso de duda o en caso de crisis de angustia, desesperanza, estados de shock o crisis nerviosas. Este remedio consta de cinco flores:

  • Rock Rose
  • Impatiens
  • Cherry Plum
  • Star of Bethlehem
  • Clematis

¿Cómo tomar las flores de bach?

Si vamos a realizar un tratamiento a base de flores de Bachy decidimos visitar a un terapeuta especializado, tomaremos la mezcla que nos indique, las cantidades que nos indique y siguiendo las pautas que nos indique.

Pero si vamos a implicarnos y tomar nuestro propio remedio, lo más importante en primer lugar es informarse abundantemente. Es decir, hacer una selección de buena literatura al respecto y comprobar todas las flores, sus efectos y sus aplicaciones.

A continuación, te explicamos, de manera general, algunas pautas para elaborar y tomar tu propia mezcla. Recuerda que esta información es orientativa y que si decides seguir esta opción debes informarte en profundidad. Esto es solo una aproximación para que te hagas una idea general:

  • Para elaborar la mezcla necesitarás un recipiente vacío de vidrio de 30ml con cuentagotas. Llénalo hasta los ¾ de agua mineral o depurada. Añade 3 gotas de cada flor que quieras utilizar (máximo 7). Por último añade unas gotas de Brandy para que el alcohol actúe de conservante.
  • Pon cuatro gotas debajo de la lengua, cuatro veces al día. No lo tragues inmediatamente, procura mantenerlo en la boca unos segundos.
  • Si tienes una crisis o un ataque pánico, ansiedad o cualquier otro malestar emocional, puedes tomar cuatro gotas adicionales cuando se de el caso.
  • Procura tomarlas siempre entre comidas.
  • La forma más efectiva de obtener resultados es con constancia y regularidad.

Efectos de las Flores de Bach

Al iniciar un tratamiento con flores de Bach se pueden notar algunos efectosque, lejos de ser adversos, confirman el efecto del tratamiento. Estos son algunos síntomas:

  • El problema emocional que se quiere tratar puede manifestarse más severamente los primeros días de tratamiento.
  • La persona tratada puede manifestar cambios de humor, llanto, risa, euforia o algún tipo de desarreglo emocional los primeros días de tratamiento.
  • Tendencia a la introspección.

Estos efectos manifiestan el inicio de lo que los terapeutas florales llaman catarsis, o limpieza emocional del paciente. Los terapeutas recomiendan intentar sobrellevar los primeros días de tratamiento aunque estos síntomas aparezcan, aunque, si se hacen insoportables, se puede disminuir la dosis o cambiar la mezcla que se haya elaborado, ya que también cabe la posibilidad de que no sea la más acertada.

 

Fuente: http://www.vidanaturalia.com

 

La dignidad humana

A continuación dejamos un pequeño resumen sobre el tema La dignidad humana, que al igual que otras actividades del mes de mayo, están dedicadas a los valores.

Aquello en las personas que no se puede medir, quizás sea porque pertenezca a lo más profundo del ser humano, como la dignidad.

Sin embargo, si no entendemos en su completura este tipo de elementos, no los podemos identificar en nosotros mismos. Por eso, la filosofía se ha preocupado por estos temas tratando de encontrar una idea acabada que sirviera a todo el ser humano.

Sobre la dignidad hay diferentes posturas: negar que existe; relacionarlo solo con lo que nos es afín o con los derechos humanos, como por ejemplo una vivienda digna, un trabajo digno, etc, que evidentemente son necesarios.

Kant, Schiller, Platón y otros dicen que la dignidad no depende de lo externo, ni tanto de lo necesario para vivir, sino que es propia del ser humano. Algo que el ser humano conquista y nadie se la puede quitar, pero del mismo modo nadie se la puede dar, sino que es como un regalo que se hace a sí mismo y se refleja en el exterior.

La palabra dignidad procede del latín dignus, lo valioso, lo válido…o sea lo más valioso del ser humano. Antiguos filósofos y culturas hablan de que el ser humano está formado por una parte más material y otra más sutil y atemporal. Por tanto la dignidad, sería lo que nos acerca a lo atemporal viviendo de acuerdo a los dictámenes de esa parte más espiritual.

Lo más digno es aquello más valioso en el ser humano. Algunos dicen que es la razón. De hecho, la palabra humano contiene en ella el sustantivo man (hombre en inglés) cuya raíz significa el que piensa. El poder pensar, reflexionar sobre conceptos transcendentes, proyectarnos hacia el futuro, etc, esa capacidad es propia del ser humano.

Conocernos a nosotros mismos nos acerca a la dignidad. Hay que plantearse que podemos ser mejores de lo que somos actualmente. Quizás haya que plantearse que estamos en construcción y eso nos ayuda a buscar la dignidad porque va a hacer que encontremos en nosotros elementos que aun tenemos que explotar, por ejemplo, nuestros valores, las fortalezas, el amor, la inteligencia, la voluntad…que pertenecen a esa parte atemporal del ser humano.

La parte más material del ser humano también tiene valores:  el orden mental, la salud del cuerpo, el correcto uso de nuestra energía y que nuestros deseos no sean solo para nosotros, sino que también deseemos lo bueno para los demás.

Lo que también nos puede dar dignidad es que nuestra vida tenga un sentido aparte de lo que haga falta para subsistir. Pero perdemos dignidad con la ignorancia. La ignorancia es no tener visión de lo verdadero, de lo real. La opinión es coger parte de lo verdadero, de lo real y creer que se trata de la verdad completa.

También perdemos dignidad con el miedo; la falsa dignidad cuando se confunde con honores, medallas y cargos o aplausos externos; la vanidad; y la indiferencia que crea máscaras o barreras haciendo creer que no nos afectan las cosas, lo que lleva a la apatía.

Acompañan a la dignidad, la integridad, la unión, la coherencia y la honestidad que busca la veracidad en lo que hacemos y lo que nos rodea. La dignidad es ser responsable de nuestras propias decisiones.

Tres frases se encontraban escritas en el oráculo de Delfos: nada en demasía, conócete a ti mismo, sé digno.

El teatro iniciático o mistérico II

….Porque ese momento no consistía en enterarse de un argumento nuevo, sino vivirlo con la conciencia de que el universo es cíclico como lo es toda nuestra vida. Una vez al año una obra que repetía los mismos acontecimientos ponía al hombre en contacto con esa repetición de toda la naturaleza, con los grandes héroes, con los grandes personajes, con los grandes dioses.

 

Estilos

Cuando se habla del teatro griego se puede hablar de tres grandes estilos: tragedia, drama y comedia. La tragedia es la que más se acercará a lo que llamamos teatro iniciático; el destino y los dioses regían por completo el acontecer de los hombres que eran como muñecos llevados, en su ignorancia y en su ceguera, hacia un punto del cual no podían alejarse; eran llevados por una fuerza tremenda, la de la tragedia, la del destino, es la enorme voluntad de los dioses que se impone sobre la voluntad de los hombres.

En el drama se atempera un poco esta situación y hay un juego intermedio entre la voluntad de los dioses y la de los hombres, que se hacen más seguros de sí mismos, más dueños de su destino, y tienen la posibilidad del esfuerzo y de la redención. Sufren, pero ya no están ciegos.

La comedia muestra un aspecto más lúdico de la existencia. Los hombres se ríen los unos de los otros. Los dioses también se burlan de los hombres, pero generosa y paternalmente, como si les hiciera gracia ver los esfuerzos humanos por conseguir algo y la torpeza con que actúan para conseguirlo. El destino ya no actúa con tanta dureza sobre los hombres, porque ellos tampoco alteran de una manera demasiado decidida las leyes de la Naturaleza. Son hombres-niños que ya han perdido el contacto con lo mistérico, con lo iniciático, y juegan un poco a vivir; los hombres se ríen y por eso también se ríen los dioses.

Lo importante del teatro iniciático es que, a un nivel u otro, al nivel profundo de la tragedia o al nivel más sencillo de la comedia, siempre ha ofrecido algo, una iniciación, una enseñanza, una apertura. Muy profundo, muy cerrado era entonces el verdadero teatro iniciático, en el cual sólo los sacerdotes comprendían lo que decían, qué hacían, cuándo lo decían y cómo lo decían.

En un segundo nivel podemos hablar de un teatro para pensar y para purificarse, puesto que todo lo que acontecía en la escena era también lo que acontecía en los seres; y eso obligaba a meditar, y aunque se sufría, había una manera de purificarse, porque la resolución del teatro era también la propia resolución del hombre y porque los finales, si es que se puede hablar de un final en la vida y en el teatro, eran también esos finales que había que poner a cada una de las situaciones humanas. Y si hablamos de un teatro más sencillo, más popular, era también una forma de acercar al pueblo a unas realidades que de otra manera se le habrían escapado, y mostrarle que detrás de un telón pasan muchas cosas que no siempre se ven, y que cuando cae, si no somos capaces de abrir nuestros propios ojos, difícilmente vamos a poder ver aquellas otras realidades superiores.

El autor

El que escribe, ¿puede ser un autor cualquiera? Evidentemente hay una enorme diferencia entre aquellos autores de la gloriosa época clásica, de la tragedia griega, y los autores que pueden escribir hoy una obra de teatro, aunque siempre hay excepciones. Cuando Esquilo escribía teatro, se sobrecogía, y no faltan los biógrafos que dicen que sólo escribía cuando estaba animado por el impulso de Dionisos. Tanto penetró en los misterios que, según algunos relatos y tradiciones, murió de una manera extraña, como si los mismos colegios sacerdotales hubieran decidido silenciarlo, porque ya su inspiración era tan grande y su capacidad de percibir los misterios profundos era tan elevada, que era imposible reproducirlos en obras teatrales: la mayoría del público estaría incapacitado para entender lo que se le estaba proporcionando.

Así que del autor nos quedaremos con una idea: la inspiración. Sin inspiración, sin contacto con una idea o con un arquetipo, no puede haber una obra de arte ni una obra de teatro.

El espectador

El espectador no está simplemente sentado en los graderíos de piedra. Cuando empezaron a hacerse los grandes teatros, la gente empezaba a ver una obra al amanecer y terminaba a la tarde, con algunos intermedios, pero en realidad no estaba en el asiento, estaba en la escena, estaba en los personajes y, como decía Aristóteles, el público se transportaba a otro mundo a través del temor y de la compasión. No era un temor cualquiera, no era sentir miedo; era ver a través de los personajes, sentir el temor de lo que podía suceder si en nuestra ignorancia quebrantábamos las leyes inmutables de la naturaleza, saber cuál era su respuesta cuando el ser humano no se avenía a aquello que constituye el orden universal. Y ese temor hacía que los espectadores se sintieran mucho más conscientes de su obligación, y experimentaran compasión ante el gran personaje, ante el que sufre con mucha más altura que uno mismo. Una compasión sagrada al compartir el sentimiento, porque todos los personajes, desde los dioses hasta los hombres, estaban sometidos a situaciones difíciles, a grandes elecciones, a lo que más atormenta a los seres humanos: tener que elegir entre una y otra cosa, entre lo humano y lo divino. Ello hacía que el espectador sintiera compasión por el personaje y por sí mismo y era así como se purificaban y era así como se producía esa fantástica catarsis.

El actor

El actor era el que vivía realmente el teatro iniciático. Para él estaba realmente hecho ese personaje que cambiaba de vestimenta varias veces a lo largo de una obra, que cambiaba de voz, de máscaras, que de pronto era hombre, de pronto era mujer, anciano y niño; ese actor era el que sentía cuán pasajeras son las situaciones de la vida, lo rápido que se viene, lo rápido que se va, lo que significa haber nacido, lo que significa morir, la poca diferencia que hay entre ser hombre y mujer, entre estar en el escenario o detrás del escenario. Era el actor el que vivía muchas vidas en pocas horas, el que pasaba a través de muchísimos momentos, a través de larguísimas etapas de la historia en pocos minutos. Para él estaba hecho el teatro iniciático si era verdaderamente un actor.

Ante esto, podemos decir que hoy contamos con artilugios, con teatros muy perfectos con todo tipo de elementos técnicos como para producir las más variadas experiencias en los espectadores; pero falta el espíritu en el actor y en el espectador, y si el actor asume el espíritu del personaje al que representa, no siempre tiene la capacidad de transmitirlo al que está más allá del escenario.

Por otra parte, ¡se han tergiversado tanto los argumentos! Hoy podemos ver en el teatro escenas de la vida cotidiana donde prevalecen los intereses diarios y donde tenemos que ver cómo unos le sacan los ojos a otros y cómo unos destrozan a otros al igual que lo vemos simplemente leyendo un periódico. Participamos en conjunto de ese liberarnos de pesos interiores, pero no abrimos ninguna puerta ni nos iniciamos en nada porque el teatro iniciático, tal como se concebía en la Antigüedad, era totalmente pedagógico; lo que intentaba era enseñar, transformar. Repitiendo las palabras del profesor Livraga, que dedicó uno de sus libros a la tragedia griega, ese teatro iniciático nunca fue una farsa: fue la realidad misma sin tiempo y sin espacio. En nuestra realidad diaria estamos sometidos a un espacio físico y a un tiempo que nos comprime y que nos obliga a hacer equis cosas en equis minutos, pero en ese teatro, en ese maravilloso teatro de enseñanza, hay una realidad absoluta donde no importa qué espacio ocupamos ni cuánto tiempo nos lleva. Lo importante es lo que aprendemos y lo que recogemos, la experiencia viva que nos llevamos.

Lo que pretendía el teatro iniciático era que sin necesidad de pasar cada una de las circunstancias de la vida y cada una de sus experiencias, se saliera de cada representación un poco más rico de lo que se había entrado, rico como ser humano, rico en comprensión, en evolución. No se puede decir que verdaderamente el teatro iniciático rompa las barreras del tiempo y del espacio. No se puede hablar de volver atrás; no hay atrás, no hay antes. Lo que propondríamos es una recuperación de raíces, de elementos sagrados, a tal punto de hacer otra vez un teatro de la vida, un teatro para vivir, donde los seres humanos nos sintamos mágicamente desdoblados, en parte espectadores, en parte actores, y poder recuperar así el sentido de nuestra propia identidad como nos cuentan que hicieron aquellos hombres que nos precedieron.

Conclusión

¿De dónde venimos, quiénes somos y hacia dónde nos dirigimos? Sería el sentido profundo del teatro iniciático.

Tendría que cerrarse algo, y a cambio algo tendría que abrirse dentro de cada uno de los espectadores. Nosotros, que no tenemos aquel teatro, tenemos en cambio la necesidad imperiosa de transmitir unas ideas que correspondieron a la Humanidad de siempre, que es también la de hoy y puede ser la de mañana.

¿Por qué no pensar que entre nosotros están aquellos que estén dispuestos a recuperar el teatro para aprender a vivir, para enseñar a vivir? Porque siempre seguiremos actuando y presenciando el infinito, el inacabable teatro de la vida, el verdadero teatro iniciático.